Todo ello se concentra en la oración final.
En ella se nos habla del abandono
de la esperanza:
los muertos no sienten nada.
Pero sin embargo, se lanza esta
oración a Dios sin Dios.
Es una oración ante la ausencia
que no deja de añorar
una presencia.
Como la lluvia que moja y
llega hasta la piel.
My life with out me